A partir del próximo martes, el seleccionado argentino de Menores de 20 años se embarcará en una nueva cruzada mundialista, esta vez con cuatro tucumanos en el frente: Mateo Carreras (Los Tarcos), Gonzalo García (Natación), Francisco Coria (Lince) y Thomas Gallo (Universitario). Para los primeros dos, se trata de una experiencia ya conocida, pero no por eso menos emocionante. Para los otros dos, en cambio, todo resulta un descubrimiento. Todos han cruzado ya varias veces la puerta de embarque con motivo de las diferentes concentraciones nacionales que conforman el largo proceso de selección, pero esta vez es diferente: esta vez, son 28 elegidos de siete provincias diferentes con la misión de representar al país en el concierto de las potencias juveniles y, de ser posible, superar el bronce obtenido hace tres años, en Inglaterra.
Será de todo, menos sencillo: los tres grupos reúnen a los 12 mejores seleccionados del planeta. Argentina compartirá el primero junto a Gales, (rival del debut el próximo martes), Fiji y Francia, actual campeón del mundo.
“Es un grupo muy duro, pero yo creo que no nos afecta en nada que esté Francia. Es más, nos incentiva”, asegura Thomas, que ya viene desde hace tiempo ganando experiencia en el plantel superior de las “Serpientes”.
“A mí me gusta el grupo. Creo que estamos en condiciones de enfrentarnos a cualquier potencia”, promete Gonzalo, que ya va por su tercer y último Mundial Juvenil. “Es más, me parece que está bueno enfrentarse primero con Gales. Sería bueno ganar ese primer partido para sumar confianza y llegar de la mejor manera al tercero, contra Francia. Por supuesto, no hay que olvidarse de Fiji, que también es un equipazo, con jugadores muy fuertes y, sobre todo, muy rápidos”, alerta el medio scrum de Natación.
Francisco se confiesa entusiasmado por la posibilidad de seguir los pasos de su hermano mayor, Emiliano Coria, quien también vistió la camiseta de los Pumitas. “Es una alegría tremenda vivir lo que en su momento vivió él. Mi familia está muy contenta por la convocatoria, y ahora más que nunca cuento con el apoyo de ellos”, destaca el de Lince, que puede ocupar el puesto de pilar derecho o de hooker.
Respaldo
Después de casi una década, Argentina volverá a ser anfitrión del tercer torneo en jerarquía que ofrece World Rugby, después del Mundial de Mayores y del Mundial de Seven. La condición de local puede representar una presión extra para muchos, pero los Pumitas tucumanos no lo creen así.
“A mí me parece buenísimo, para que más gente se interese por el rugby y se acerque. Además, como jugador, me parece que es importante contar con el apoyo de familiares y amigos. Mucha gente vendrá a vernos a Rosario y Santa Fe, y ese apoyo es un plus aparte que te motiva a dar todo y a seguir corriendo cuando ya no das más. No tengo dudas de que este Mundial va a ser una fiesta”, anticipa el tryman argentino del Mundial pasado. De hecho, el velocista de los “Rojos” fue una de las mayores revelaciones del torneo, al punto que inmediatamente después fue convocado para jugar el Mundial de Seven de Mayores con los Pumas 7’s sin haber sido convocado antes.
En la cita del año pasado, Argentina mostró un buen nivel, pero falló en momentos determinantes y debió conformarse con un sexto lugar que no llenó sus expectativas. Aunque ponerse objetivos de resultado no forma parte de la filosofía del head coach José Pellicena, lo cierto es que los Pumitas apuntan cuando menos a mejorar esa performance.
“Me parece que el grupo está muy bien para eso, mejorando día a día. Junto con el staff, creemos que podemos hacer un gran torneo”, arriesga Coria. “Por ahora estamos tranquilos. Seguramente los nervios aparecerán antes del primer partido, pero trataremos de mantenerlos bajo control”, agregó García. “Venimos trabajando muy duro en la obtención del scrum, pensando que eso va a ser clave”, completó Gallo.